Contenido:
1. Cambio Climático y Vulnerabilidad.
2. Respuesta Internacional.
3. Acciones en México.
4. El Esfuerzo del Senado y el Proceso Legislativo.
5. La Ley General de Cambio Climático.
1.- Cambio Climático y Vulnerabilidad.
La temperatura media de la superficie terrestre ha subido más de 0.6oC desde los últimos años del siglo XIX. Científicos de la Agencia Atmosférica de la NASA (NOAA por sus siglas en ingles) reportó que 2010 ha sido el año más caliente de la tierra desde que se cuentan con registros en el año 1880. Este año es también el año número 34 que en forma consecutiva la temperatura media anual ha estrado por arriba del promedio del siglo XX. Se prevé que este incremento continúe hasta registrar entre 1.4oC y 5.8oC para el año 2100, lo cual representa un cambio rápido, profundo y catastrófico. Aun cuando al día de hoy se pudiera resolver las causas humanas del calentamiento, la inercia del sistema climático es tal que durante el siglo XXI tendríamos una temperatura que sería mayor que en cualquier siglo de los últimos 10.000 años, con consecuencias que ya comenzamos a experimentar para todos los ecosistemas y el desarrollo de la humanidad.
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Figura 1 |
La razón principal del incremento de la temperatura es un proceso de industrialización acompañado con un crecimiento económico y de la población iniciado hace siglo y medio y, en particular, la combustión de cantidades cada vez mayores de petróleo, gasolina y carbón, la tala de bosques y algunos métodos de explotación agrícola. Estas actividades han aumentado el volumen de Gases de Efecto Invernadero (GEI) en la atmósfera, sobre todo de dióxido de carbono, metano y óxido nitroso. Estos gases se producen naturalmente y son fundamentales para la vida en la Tierra; impiden que parte del calor solar regrese al espacio, y sin ellos el mundo sería un lugar frío y congelado. Pero cuando el volumen de estos gases crece sin descanso, provocan temperaturas elevadas y modifican el clima.
La Figura 2 indica, para el año 2005, en un solo “esquema de tuberías” los sectores que originan las emisiones mundiales antropogénicas de GEI, las actividades específicas que los provocan y el tipo de gas con efecto invernadero que se emite expresado en toneladas equivalentes de bióxido de carbono.
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Figura 2 |
La mayor parte de las emisiones las producen la combustión de carbón, petróleo sus derivados y el gas natural (combustibles fósiles) usados como fuente de energía para satisfacer las necesidades humanas. Por actividad, la más relevante es el consumo energético en nuestros hogares y lugares de trabajo, la sigue el transporte, e inmediatamente las emisiones causadas por la deforestación (en este caso las emisiones provienen de la perdida de biomasa forestal la cual constituye un reservorio de carbón que al quemarse o talarse, eventualmente se transforma a CO2 que se acumula en la atmosfera). En el ramo industrial, las mayores emisiones proviene de la industria del cemento, su orden de magnitud es equivalente a las producidas por la pérdida de nitrógeno de los suelos agrícolas, estas últimas causadas en parte por el uso inadecuado de fertilizantes químicos.
El Grupo Intergubernamental de especialistas en Cambio Climático (IPCC por sus siglas en ingles) ha señalado que para evitar situaciones peligrosas e incontrolables tendríamos que limitar el aumento de temperatura global a no más de 2°C.
Cabe señalar que dicho aumento ya representaría para México un serio problema pues ocasionaría escases crónica de agua, una mayor desertificación del país, mayor incidencia de fenómenos meteorológicos extremos y la proliferación de enfermedades y plagas actualmente bajo control, entre otras.
El esfuerzo requerido para reducir emisiones se muestra en la Figura 3. Solamente las trayectorias indicadas en la franja color verde podrían lograr que la temperatura no aumente mas de 2°C, dicha trayectoria implica emisiones a menos de la mitad de las actuales para mediados de siglo y prácticamente nulas para final de siglo.
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Figura 3 |
Varios estudios han demostrado que dichos cambios son técnicamente posibles y que el costo de la inacción es altísimo y lo será más en la medida que dilatemos nuestras acciones para resolver el problema. Sin embargo, la falta de conocimiento y convencimiento sobre el problema y sus soluciones, la indolencia, la irresponsabilidad, la falta de solidaridad con los más vulnerables, y también los interés económicos que acompañan nuestro patrón de desarrollo basado en combustibles fósiles y en una explotación no sustentable de los recursos globales, han hecho imposible que hasta la fecha, el concierto de naciones respondan en la medida que el problema requiere. Sin embargo la falta de acción de otros, como lo ha mencionado el Presidente Felipe Calderón H. no es escusa para que los mexicanos nos crucemos de brazos. Aunque hay que reconocer que para que el problema se resuelva se requerirá de una acción mundial concertada y que tal esquema requiere de avanzar con acuerdos y acciones mundiales, si, rápidamente, pero necesariamente paso a paso.
La actitud correcta y necesaria como ciudadano y como país es responder con acciones que demuestren responsabilidad y resultados relevantes para mitigar nuestras emisiones y para adaptarnos al cambio climático.
Para resolver las causas del problema tendremos que cambiar nuestros patrones de consumo y producción hasta lograr una descarbonización de nuestra economía a través de mejorar nuestra eficiencia, del uso de energías limpias, de revertir la perdida de capital natural, de enverdecer nuestras ciudades, y de reusar o eliminar nuestros desechos.
Este proceso denominado “enverdecimiento de nuestra economía” no es solo el único camino aceptable, sino que está demostrando que es capaz de generar mayor prosperidad, equidad, empleos y bienestar que el modelo “marrón” insostenible que actualmente tenemos.
México por su situación geográfica entre dos océanos, en zona de ciclones, su orografía llena de cadenas montañosas, por su gran variedad de ecosistemas y biodiversidad, y finalmente por sus carencias en infraestructura de sus asentamientos humanos así como por su desigualdad social, se vuelve particularmente vulnerable al Cambio Climático.
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Figura 4.- Estimación de la vulnerabilidad al Cambio Climático en el Planeta publicada por maplecroftTM. |
El Inventario Nacional identifica que los principales sectores que emiten GEI son: energía, incluido el transporte (60.7%), desechos (14.1%), cambio de uso de suelo y silvicultura (9.9%), procesos industriales (9%), y agricultura (6.4%).
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Figura 5. Emisiones de GEI en México en 2006 Total 709 MtCO2 eq |
El total de esas emisiones del año 2009, representa un incremento del 40% con respecto al nivel de 1990. Ello indica que nuestro país necesita llevar a cabo acciones de mitigación que permitan el desacoplamiento de las emisiones de GEI del desarrollo económico. En comparación con el perfil de emisiones mundiales mostrado en la Figura 2, las emisiones nacionales muestran un mayor porcentaje de metano proveniente del manejo de los desechos urbanos y de las operaciones de PEMEX. Esta diferencia de las emisiones de Mexico con respecto a las mundiales marca adecuadamente dos campos de acción (manejo de desechos- municipales y agropecuarios- y emisiones fugitivas de PEMEX) en donde la oportunidad de implementar programas y proyecto para reducir nuestras emisiones son importantes y rentables.El incremento de las emisiones de GEI del país ha estado acompañado con el de la temperatura. Al respecto, las observaciones instrumentales de 1971 a 2008, muestran que la temperatura media anual se ha elevado 0.6°C en promedio para el territorio mexicano. La media histórica del período se ubica en 20.9°C y muestra que las observaciones están por arriba de la media histórica después de 1990; en los últimos 10 años la tendencia indica un calentamiento acelerado de 0.7°C/decenio.
Como ya mencioné, la ubicación geográfica, la desigualdad social, la falta de infraestructura, entre otros factores hacen de México un país altamente vulnerable a los efectos del cambio climático. En un escenario de incremento de la temperatura de 2º C se prevé que nuestro país experimente impactos de índole ambiental, social y económica estrechamente vinculados. Algunos de esos cambios son:
• Alteración de los patrones de lluvia, con incrementos en la zona Noroeste del país y del mar Caribe.
• Incremento en número e intensidad de ciclones tropicales y huracanes.
• Reducción en la precipitación en las regiones hidrológicas de Baja California, Noroeste, Pacífico Norte, Cuencas Centrales del Norte y Valle de México
• Las actividades agrícolas, particularmente las de temporal pueden experimentar una productividad decreciente e incluso la pérdida de cosechas.
• Las actividades silvícolas enfrentarán la amenaza de los incendios forestales y la aparición de plagas.
• Las actividades pesqueras experimentarán la reducción de las capturas debido a la migración de especies comerciales hacia zonas oceánicas más favorables.
• La reducción de la superficie para actividades pecuarias como consecuencia de la disminución de la precipitación y la recarga de acuíferos.
• El detrimento paulatino de la capacidad de los ecosistemas para brindar servicios ambientales como reguladores del clima, captura de carbono, mantenimiento de la diversidad biológica y fábrica de agua.
• El incremento de la vulnerabilidad de las especies que actualmente se encuentran sujetas a alguna categoría de riesgo y de las endémicas ante la fragmentación de su hábitat o la competencia con especies exóticas invasoras.
• El aumento de las enfermedades transmitidas por vector como el dengue, el dengue hemorrágico, el paludismo y la malaria.
• Incremento de la morbilidad y mortalidad por olas de calor, enfermedades gástricas y respiratorias agudas y crónicas, particularmente en los grupos de población más vulnerable.
• La afectación a la infraestructura petrolera, carretera y de transmisión de energía eléctrica.
• El incremento del número de personas en condiciones de pobreza, particularmente alimentaria y de capacidades como consecuencia de la disminución de la producción de alimentos y por el desplazamiento de poblaciones hacia zonas no afectadas por desastres naturales asociados al cambio climático.
• La constante desviación de recursos presupuestales de los tres órdenes de gobierno para hacer frente a los impactos adversos del cambio climático y auxiliar a la población afectada.
Con dicho panorama mundial y nacional queda claro que el Cambio Climático es el mayor reto que enfrenta la humanidad y que ignorarlo nos llevaría a costos inaceptables y a un grave retroceso en nuestro desarrollo. Es por lo tanto una urgencia que en México se legisle para enfrentar este problema.
2.- Respuesta Internacional
En 1992, la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) se adoptó como base para una respuesta mundial al problema del cambio climático. Con sus 192 Partes, cuenta entre sus miembros a casi todos los países del mundo. Su objetivo último es estabilizar las concentraciones de GEI en la atmósfera situándolas en un nivel que impida interferencias humanas nocivas en el sistema climático.
La Convención se complementa con el Protocolo de Kioto de 1997, que cuenta con 184 Partes. En virtud de este tratado, 37 países industrializados y la Comunidad Europea se han comprometido a reducir sus emisiones un promedio del 5% para 2012 con respecto a los niveles de 1990. Los países industrializados deben ante todo tomar medidas internas contra el cambio climático; pero el Protocolo les permite también cumplir parte de sus compromisos de reducción de las emisiones en el exterior a través de los llamados "mecanismos basados en el mercado".
Por ejemplo, uno de los mecanismos del Protocolo basados en el mercado, el Mecanismo para un Desarrollo Limpio (MDL), permite a los países industrializados comprar Reducciones Certificadas de Emisiones (bonos de carbono) logradas por proyectos de desarrollo sostenible implementados en los países en desarrollo.
En los últimos años la efectividad y credibilidad del proceso multilateral de la Convención y del Protocolo llegaron a un punto muy bajo después del fracaso de lograr un acuerdo vinculante universal que se intentó en la Conferencia de las Partes de la Convención y la Reunión de las Partes del Protocolo de Kioto celebrada a finales de 2009 en Copenhague (COP15/MOP5). Con el liderazgo de Mexico durante la COP16/MOP6 celebrada en Cancún a finales de noviembre de 2010, se logro relanzar el ímpetu de las negociaciones y se acordó un paquete de decisiones denominado “Los Acuerdos de Cancún”. Sin embargo a la fecha, las propuestas planteadas para reducir los GEI siguen siendo insuficientes. Si se mantienen las tendencias actuales, aunque se cumpliesen plena y puntualmente todas las promesas y planes actuales de reducción o limitación, las emisiones mundiales seguirían aumentando.
No podemos posponer mucho más la decisión de tomar medidas más rigurosas para reducir las emisiones de GEI, especialmente, debido a cuestiones de equidad, capacidades nacionales y de volumen, por la parte que corresponde a las naciones desarrolladas. De lo contrario, corremos el peligro de perder la oportunidad de mantener el incremento de la temperatura media mundial en 2 grados Celsius, y ya nunca podremos mantenerla en 1,5 grados.
Un aspecto particularmente preocupante son las proyecciones de la Agencia Internacional de la Energía de que en 2030 la demanda mundial de energía habrá aumentado un 55%. Esta misma agencia en concordancia con sus predicciones, reporto que el año de 2010 fue el de mayores emisiones históricas provenientes del sector energético.
En el período hasta 2030, la infraestructura mundial de suministro de energía requerirá una inversión total del orden de 26 millones de millones de USD, de los cuales aproximadamente la mitad será necesaria en países en desarrollo. Si el mundo no consigue que esas inversiones sean respetuosas con el medio ambiente dirigiéndolas a tecnologías con bajas o nulas emisiones, en 2050 las emisiones globales habrán aumentado un 50% en vez de disminuir más de 50% como la ciencia nos exige (Ver Figura 3).
Creo que en el ámbito internacional nos toca la tarea como país y en particular como Senador de la Republica, de seguir insistiendo en la pronta implementación de los Acuerdos de Cancún, y en acelerar el paso para lograr una Economía baja en Carbono que permita avanzar hacia un acuerdo internacional vinculante que limite el calentamiento global a no más de 2°C y preferentemente por debajo de 1.5°C.
3.- Acciones en México
Por lo que se refiere a las acciones a nivel internacional, el Senado reconoce el papel proactivo de nuestro país no sólo por implementar acciones para dar cumplimiento a los compromisos contraídos en el marco de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático CMNUCC) y su Protocolo de Kioto (PK); sino también por impulsar el avance de las negociaciones internacionales. Al respecto, mención especial merecen las acciones siguientes:
· Firma de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) el 13 de junio de 1992 y ratificación de la misma el 11 de marzo de 1993.
· Firma del Protocolo de Kioto (PK) el 9 de junio de 1998 y ratificación del mismo el 7 de septiembre de 2000. El Protocolo entro en vigor hasta el año de 2005, cuando se llegó a la ratificación de países desarrollados que sumados incluían por lo menos el 55% de las emisiones de 1990.
· Presentación de cuatro Comunicaciones Nacionales, en las que se incluye el Inventario Nacional de Emisiones de GEI. Actualmente está en proceso de elaboración la 5ª Comunicación Nacional que presentará al Secretariado de la Convención en el año 2012.
· Asociación al Acuerdo de Copenhague en enero del año 2010 para presentar su propuesta de reducción de emisiones por acciones nacionales de mitigación apropiadas en el corto y mediano plazos, que respectivamente son: la reducción de hasta un 30% al año 2020 conforme al escenario tendencial, y al 2050, reducción del 50% con respecto a las emisiones del 2000, sujeto a la recepción de asistencia económica y tecnológica. Estas Metas fueron incorporadas oficialmente a la CMNUCC en Cancún.
· Organización, junto con el Secretariado de la CMNUCC, de la 16 Conferencia de la Partes de la CMNUCC, y la Sexta Reunión de las Partes del PK (COP16-MOP6)
· Liderazgo del Presidente Calderón y de la Canciller de México como Presidenta de la COP16-MOP6, para la adopción en diciembre de 2011 del paquete de decisiones conocido como “Los Acuerdos de Cancún”.
A nivel nacional, destacan las siguientes acciones y políticas:
· Integración de un Comité Intersecretarial para el Cambio Climático en 1997 con el objetivo de analizar la ratificación mexicana del PK y fijar su postura en las negociaciones internacionales.
· Reconocimiento en el Plan Nacional de Desarrollo 2001-2006 de los efectos negativos de los GEI y el compromiso de promover medidas de mitigación de emisiones de esos gases.
· Establecimiento de un programa piloto de límites de emisión e intercambio virtual de emisiones entre las unidades productivas de Petróleos Mexicanos en 2001.
· Instalación de la Comisión Mexicana para Proyectos de Reducción de Emisiones de GEI (COMEGEI) quien funge como Autoridad Nacional Designada para Proyectos del Mecanismo para un Desarrollo Limpio del PK, en enero de 2004.
· Establecimiento del Programa Nacional Voluntario de Contabilidad y Reporte de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero, comúnmente conocido como Programa GEI México, en el año 2004. Hasta noviembre del año 2010, 86 empresas reportaban sus emisiones al registro.
· Establecimiento del Comité Directivo de la iniciativa Metano a Mercados que forma parte de la iniciativa internacional para recuperar y aprovechar el metano como energía alternativa.
· Publicación en abril del año 2005 del Acuerdo por el que se crea con carácter permanente la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático que incorpora las funciones del COMEGEI y se encarga la elaboración de programas y estrategias nacionales contra el Cambio Climático.
· Implementación del Fondo Mexicano de Carbono (FOMECAR), que a la fecha apoya diversos proyectos de mitigación de emisiones de GEI.
· Suscripción de diez Memoranda de Entendimiento con países Anexo I y con el Banco Japonés de Cooperación Internacional en el periodo 2004-2006, para apoyar el desarrollo de proyectos de reducción de emisiones de GEI, susceptibles de adquirir Certificados de Reducción de Emisiones.
· Alusión específica al cambio climático en el Plan Nacional de Desarrollo 2007-2012, en el Eje 4 “Sustentabilidad”. Éste incorpora dos objetivos de política nacional asociados al cambio climático: la reducción de las emisiones de GEI e impulsar medidas de adaptación a los efectos del cambio climático.
· Presentación de la Estrategia Nacional de Cambio Climático en mayo del año 2007.
· Publicación en el Diario Oficial de la Federación en agosto del año 2009 del Programa Especial de Cambio Climático. Éste establece las políticas, estrategias, objetivos y metas que la Administración Pública Federal se compromete a llevar a cabo durante la presente administración para mitigar las emisiones de GEI, reducir la vulnerabilidad y favorecer la adaptación a los efectos de este fenómeno. Al año 2012 la meta establecida de mitigación es de 50.6 Mt CO2e, lo que pone a México en una ruta adecuada para lograr la meta indicativa de reducción de 30% de sus emisiones con respecto a la tendencia en el año 2020.
· Registro de 127 proyectos en el marco del Mecanismo para un Desarrollo Limpio del Protocolo de Kioto y se han otorgado a México 8,340,029 Toneladas de CO2 eq. de Reducciones Certificadas de Emisiones (CERs), al 2° de julio del año 2011.
4.- El Esfuerzo del Senado y el Proceso Legislativo.
Senadores de prácticamente todas las fracciones parlamentaras coinciden en que la política nacional en materia de cambio climático adolece de disposiciones normativas concretas que coadyuven a enfrentar las múltiples amenazas que se imponen a nuestro país y al mundo. Por ello ya desde el año 2007 en el Senado se han presentado varias iniciativas legislativas para impulsar una Ley que combata en forma integral al cambio climático; sin embargo a la fecha ninguna de ellas ha sido aprobada.
A partir del 2010, la Comisión dictaminadora de Medio Ambiente inició un proceso de análisis de las iniciativas con Proyecto de Decreto se consultó y/o solicitó la opinión de diversas organizaciones de los sectores social, privado, académico, científico; a la Asociación Nacional de Autoridades Estatales Ambientales, a la Comisión de Medio Ambiente de la Comisión Nacional de Gobernadores, a las dependencias de la Administración Pública Federal que integran la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático y al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Asimismo, las Comisiones de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca; de Relaciones Exteriores, y de Organizaciones no Gubernamentales del Senado llevaron a cabo el foro de opinión “Agenda Legislativa de Cambio Climático: Retos y Oportunidades para México”, en el que participaron expertos representantes de los tres órdenes de gobierno, organizaciones no gubernamentales, académicas y empresariales.
Como resultado de las consultas y el foro se recibieron comentarios, inquietudes, críticas y propuestas destacando las formuladas por: el Centro Mario Molina, el PNUD, el Fondo Mundial para la Conservación de la Naturaleza (WWF), The Nature Conservancy (TNC), el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, Pronatura A.C. y de los Senadores integrantes de la Comisión Especial de Cambio Climático, particularmente a la iniciativa con Proyecto de Decreto por la que se expide la Ley General de Cambio Climático.
Por lo que respecta las dependencias y entidades del Gobierno Federal que remitieron por escrito su opinión, destacan las Secretarías de Gobernación, Economía, Desarrollo Social, Hacienda y Crédito Público, Medio Ambiente y Recursos Naturales, Energía, Relaciones Exteriores, Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, la Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal, la Comisión Reguladora de Energía, el Instituto Nacional de Ecología, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad y el Servicio Meteorológico Nacional. Asimismo se recibieron comentarios y observaciones de la Secretaría de Medio Ambiente del Distrito Federal.
El proyecto de decreto que actualmente se discute en la Cámara, incluyo cuatro propuestas legislativas sobre Cambio Climático. Para su redacción final tomo como base la propuesta que un servidor y varios Senadores del grupo Parlamentario del PAN presentamos en la sesión plenaria celebrada el 25 de marzo de 2010. Esta propuesta se consideró una pieza jurídica más amplia, cuya estructura da cabida, se complementa y fortalece con los contenidos de las otras tres iniciativas.
Para la elaboración de la propuesta que presenté, su enriquecimiento y la elaboración del dictamen final, un servidor junto con mi equipo de colaboradores y con la Comisión Especial de Cambio Climático que presido (misma que por su estatus de “Especial” no tiene la facultad de dictaminar iniciativas), se realizaron más de 100 reuniones en forma de foros y talleres en los que participaron organizaciones no gubernamentales, centros de investigación, universidades, cámaras empresariales, dependencias y entidades de la Administración Pública Federal, estatal y de organismos internacionales. Algunos de los participantes fueron: el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, Greenpeace - México, Pronatura A. C., el Fondo Mundial para la Conservación de la Naturaleza, Environmental Defense Fund, The Nature Conservancy, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, la Comisión Económica para América Latina, el Centro de Estudios del Sector Privado para el Desarrollo Sustentable, Ecosecurities – México, el Centro de Ciencias de la Atmósfera, el Instituto de Ecología, el Programa de Investigación en Cambio Climático de la Universidad Nacional Autónoma de México, El Colegio de México, el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey campus Ciudad de México, El Instituto Nacional de Ecología A. C., El Colegio de la Frontera Norte, EL Instituto de Protección al Ambiente de Nuevo León, la Universidad Iberoamericana A. C., la Fundación Humanismo Política y la Fundación Konrad Adenauer, entre otros. En dichas reuniones se escucharon y recibieron las preocupaciones, propuestas y opiniones de los participantes, la mayoría de las cuales se ven reflejadas en la propuesta de Ley.
Destaca el apoyo recibido por la Fundación Konrad Adenauer, que patrocino y coorganizo EL FORO “LEY GENERAL DE CAMBIO CLIMÁTICO” celebrado el 25 de mayo de 2010 y el Primer Encuentro Internacional de Legisladores Centro Humanistas sobre cambio climático “Posiciones frente a la COP16”, celebrado en México los días 28 y 29 de octubre de 2010; así como la organización de una interesante y aleccionadora gira a Alemania en junio de 2010. En esta gira participaron, además de un servidor, legisladores mexicanos y chilenos. La gira consistió fundamentalmente en entrevistas con expertos, legisladores y funcionarios alemanes en temas de Cambio Climático y visitas a ejemplos destacados de instituciones e iniciativas sobre eficiencia energética y energías renovables.
El Objeto de la propuesta de Ley es:
· Definir la concurrencia de facultades de la Federación, las Entidades Federativas y Municipios en la elaboración y aplicación de políticas públicas.
· Regular las acciones para la mitigación y adaptación al cambio climático.
· Establecer las bases para la concertación con la sociedad.
· Favorecer la transición hacia una economía sustentable de bajas emisiones de carbono.
· El cumplimiento de los acuerdos internacionales suscritos y ratificados por México.
El estatus actual del dictamen con propuesta de decreto de la Ley General de Cambio Climático es de aprobado por las Comisiones Dictaminadoras y dispensado de su primera lectura por el Pleno del Senado en su última sesión del periodo que termino en mayo pasado. El dictamen está en espera de su discusión y aprobación, con o sin modificaciones, o de su rechazo por el Pleno del Senado. Esto deberá ocurrir durante el próximo periodo parlamentario de Sesiones Ordinarias del Pleno del Senado que se afectará en los meses de septiembre a diciembre de 2011.
Para su aprobación se requiere del apoyo de los Legisladores, particularmente los pertenecientes a la bancada del PRI, quienes todavía no se comprometen con la propuesta legislativa que ya incluye las propuestas de tres partidos y la opinión de ciudadanos, funcionarios y legisladores conocedores del tema.
En caso de ser aprobado, la propuesta se remitirá a la Cámara de Diputados quienes podrán aprobarla, modificarla y regresarla al Senado, o rechazarla. Si la iniciativa se devuelve al Senado, el pleno podría aceptar los cambios propuestos o modificar dichos cambios y volverla a enviar a diputados para su eventual aprobación o rechazo definitivo.
El objeto del proceso de aprobación es que, antes de que se envíe una propuesta de Ley al Ejecutivo (quien también tiene la facultad de vetarla), la mayoría de los legisladores estén de acuerdo con los contenidos de la misma.
La función del Ejecutivo sería la de publicar la propuesta de Ley remitida por el Legislativo y que el propio Ejecutivo considere adecuada para su inmediata aplicación según los términos de la propia Ley.
Con voluntad política, la presión de la sociedad a través de sus organizaciones y la de los lideres y conocedores del tema -que en un acto de responsabilidad debería de ser patentes debido a la urgencia y necesidad de que México cuente con una Ley que ayude o forcé la coordinación y eficacia para combatir el Cambio Climático-, la aprobación legislativa podría estar lista en el mismo septiembre y la publicación de la misma antes de que termine el presente año.
5.- La Ley General de Cambio Climático (LGCC).
El dictamen de la LGCC que se menciono en el apartado anterior consta de 76 artículos organizados en siete títulos más 13 artículos transitorios.
A continuación resumo los propósitos e implicaciones de cada título de la Ley:
Títulos de la Ley General de Cambio Climático:
- PRIMERO.- Disposiciones Preliminares
En este Título se establece definiciones y el objeto de la Ley ya mencionados anteriormente. Cabe la pena resaltar que la ley incluye la regulación de compuestos con efecto invernadero, que además de los GEI incluyen al hollín (“black carbon” en ingles) el cual, en estudios recientes, se ha demostrado que a pesar de su relativa corta estancia en la atmosfera tiene impactos muy importantes en el clima y particularmente en la salud.
- SEGUNDO.- De la Distribución de Competencias
La ley asigna facultades y responsabilidades concurrentes a los municipios, los estados, a gobierno federal y al Gobierno de la Ciudad de México así como la obligación de legislar en la materia. Prácticamente no queda actividad importante de cualquier orden de gobierno que no tenga que implementar acciones para combatir el cambio climático.
- TERCERO.- Del Instituto Nacional de Medio Ambiente y Cabio Climático (INMAC)
Los Senadores llegamos a la conclusión de que resulta muy conveniente para el país contar con un grupo de especialistas al servicio del estado y la sociedad en temas de medio ambiente y cambio climático para que:
o Realice estudios de impactos económicos y políticas públicas sobre medio ambiente y Cambio Climático,
o Coordine la investigación y transferencia de tecnología,
o Coadyuve en la preparación de recursos humanos y
o Realice análisis de prospectiva sectorial, y colaborar en la elaboración de estrategias, planes, programas, instrumentos y acciones.
Se partiría de las funciones, capacidades y experiencia que tiene el actual Instituto Nacional de Ecología quien se transformaría en el INMAC tomado la figura de Organismo Publico Descentralizado.
- CUARTO.- Políticas Públicas de Adaptación y Mitigación
Este título contiene tres capítulos: el de Disposiciones Generales, el de Adaptación y el de Mitigación. Se describen las disposiciones, principios, objetivos, actividades y obligaciones específicas a las que ciudadanos, empresas e instituciones deberán sujetarse para combatir al cambio climático. Al aplicar los principios e indicaciones señaladas en el presente titulo y las metas que para algunas de estas actividades se señalan en los Artículos Transitorios, la sociedad y gobierno mexicano serán capaces de transitar hacia una economía baja en emisiones y cumplir las ambiciosas metas que se requieren para minimizar los efectos del Cambio Climático.
- QUINTO.- Sistema nacional para el Cambio Climático
Para logar implementar las acciones de adaptación, las reducciones de emisiones y la capacitación, transferencia tecnología y financiamiento de proyectos que se esbozan en la Ley, se requiere de un grupo de herramientas y disposiciones que hemos denominado el Sistema Nacional para el Cambio Climático. La Figura 6, muestra esquemáticamente los componentes del dicho sistema. Cabe destacar el Fondo Verde Mexicano que daría transparencia a las acciones mexicanas en Cambio Climático poniendo mayor énfasis en proyectos de adaptación.
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Figura 6.- Sistema Nacional para el Cambio Climático | | |
- SEXTO.- Transparencia y Acceso a la Información
En este título se ratifica el derecho a la información de todos, los ciudadanos y se instruye a que, la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático, en coordinación con el INEGI y el INMACC, elaboré y desarrollé una página de Internet, que incluirá el informe anual detallado de la situación general del país en materia de Cambio Climático. También se establece la obligación de transparentar los fondos aplicados por los estados en la materia.
Para garantizar la necesaria participación y coordinación de la sociedad y todos lo ordenes de gobierno, en una materia tan importante y transversal, el acceso a la información y transparencia de los recursos utilizados así como el informe sobre el cumplimento de la Ley debe ser total.
Se faculta a la PROFEPA para realizar actos de inspección y vigilancia a las personas físicas o morales sujetas a reporte de Emisiones.
Se establecen multas en caso de no entregar la información en tiempo y forma. Se remite a la Ley Federal de Responsabilidades Administrativas de los Servidores Públicos, para los funcionarios que incumplan disposiciones de la Ley.
En los artículos transitorios se finja una serie de metas muy importantes que en conjunto con la aplicación de la demás disposiciones de la Ley pondrá a México en el camino adecuado para transitar claramente hacia una sociedad sustentable de bajas emisiones en carbono, para minimizar los costos inevitables del cambio climático que ya estamos experimentando y para cumplir con nuestros compromisos internacionales.
Como podemos observar, la aplicación de la Ley General de Cambio Climático tendrá una serie de impactos prácticamente en todos los ámbitos de las actividades de la sociedad y programas de los tres órdenes del gobierno, entre ellos destacan los siguientes:
· La LGCC presenta un esquema general y transversal para la adaptación y mitigación del Cambio Climático.
· Establece un marco de planeación de largo plazo que deberá de ser respetado por los tres órdenes de gobierno y la sociedad en su conjunto.
· Asegura continuidad y reforzamiento de acciones ya emprendidas
· Crea instituciones con capacidades sobre adaptación y mitigación y refuerza las ya existentes.
· Establece un Fondo Verde para el financiamiento y apoyo a programas y proyectos de combate al Cambio Climático
· Establece el Registro de emisiones e institucionaliza los inventarios de emisiones para en una forma transparente medir reportar y verificar (MRV) las emisiones y avances en el tema de México
· Crea mecanismo novedosos de mercado, probados con éxito en otros países, para impulsar proyectos de mitigación a través de registro como la compra de reducciones certificadas de emisiones (en el Registro Nacional) y un mercado de carbono para ser usado por los generadores de energía en base a combustibles fósiles.
· Prepara al país para que México participe con liderazgo y autoridad moral en la necesaria implementación de acuerdos internacionales mucho más ambiciosos que los vigentes.
En resumen la LGCC es una iniciativa integral que promueve el desarrollo sustentable, la transición hacia una economía verde baja en emisiones y nos prepara para minimizar los impactos del cambio climático que ya comienzan a ser evidentes y que inevitable crecerán conforme se calienta el planeta y en la medida que no estemos preparados para afrontar dicho cambio.
Su aprobación es urgente para México. La dilación de su aplicación acabará causando costos innecesarios y pérdidas irreparables, afectando particularmente a los mexicanos más vulnerables, haciendo más difícil el combate a la pobreza y a la inequidad.
Senador Alberto Cárdenas Jiménez
Presidente de la Comisión Especial de Cambio Climático
Julio 2011, México D. F.